Dieciocho meses después de que la Escuela Raxter empezase la cuarentena Hetty, Byatt y Reese empiezan a sentir que les están ocultando cosas.
La escuela está ubicada en una isla, lo que ayuda a que la cuarentena sea más fácil de controlar por las instituciones pertinentes. Todo ser viviente de la isla, incluyendo flora y fauna, está infectado con un virus desconocido al que llaman TOX y que produce síntomas distintos en cada una de las alumnas y profesoras.
La búsqueda de respuestas se acelera cuando una de las amigas desaparece en circunstancias muy sospechosas.
OPINIÓN PERSONAL
Entré en la historia preparada para todo lo que la autora tuviese preparada. Por suerte, yo me esperaba terror y no ha sido eso lo que me he encontrado.
La premisa es muy llamativa y más viendo los tiempos que corren y para mi, en ese aspecto, no decepciona. Me ha gustado entrar en un proceso muy desarrollado de la cuarentena ya que permite ver cómo se han organizado, como han ido supliendo las pérdidas, las distintas funciones y roles a los que se han acogido las chicas y las profesoras y sentir como el misterio está siempre presente.
A pesar de que me hubiese gustado conocer un poco más sobre el TOX ya que lo dejan mucho a la deducción e imaginación de cada lector, me ha parecido muy impactante y muy visual conocer como les iba afectando a cada persona o ser vivo que habitaba la isla. Ayuda a comprender el comportamiento salvaje y centrado en la supervivencia que tiene todas ahí dentro. Claramente afectadas ya no solo por el virus, sino acostumbradas a convivir con brotes desconocidos de las compañeras, a combatir el hambre, etc. las dinámicas entre las chicas de Raxter son salvajes y su estabilidad pende de un hilo, un mínimo error, cualquier cosa que pueda generar desconfianza, puede desatar una pelea.
Chicas salvajes ha sido un libro que me ha mantenido muy enganchada ya que rápidamente empaticé con la necesidad de las chicas de conocer más y de llegar al fondo del asunto pero hay dos cosas que no me han acabado de convencer.
La primera es que la autora, tanto con el tema del TOX como con otros, deja las cosas demasiado al aire, que entiendo el beneficio de que cada lector pueda hacerse suya la lectura y desarrollar teorías, pero creo que es un recurso del que no se debe abusar y en este caso creo que la autora deja demasiadas cosas sin concretar (y no me estoy refiriendo al final).
Por otro lado creo que hacía el final, tenía la trama muy bien encaminada y de repente pierde el foco. Es una sensación muy personal pero creo que hacía el final incluye algún elemento que le da más dramatismo y más espectacularidad al desarrollo de los acontecimientos pero que para mi es innecesario.
En conclusión, creo que es un libro muy visual y que apetece mucho consumir esta historia en formato audiovisualOs animo mucho a leeros Chicas salvajes si buscáis un libro de misterio y mucha tensión. Para algunos momentos igual necesitas tener un poco de estómago pero aun así, vale la pena.
¡OS DESEO LAS MEJORES HISTORIAS ESCRITAS Y POR ESCRIBIR!